Vuelvo a estar como hacia tiempo, una o dos vidas ya.

Arrastrándome silenciosamente hacia rincones oscuros esperando encontrar ¿qué?

Aún no lo tengo claro.

Hace unos dias mate un pajaro.

Mi coche se cruzó en el camino de un polluelo de gorrión que dio un golpe justo frente a mis ojos para ir a parar bajo la rueda del coche que venía tras de mi.

Apenas si fue un momento. Un segundo entre todo el día cargado de responsabilidades, ruedas de prensa convocadas y móviles con poca cobertura. Apenas un segundo que no entendí.

Y sin saber muy bien porqué me eché a llorar mientras conducía, camino del trabajo. Lloraba y creo que incluso acabe gritando, como pocas veces he tenido el favor conmigo misma de hacerlo.

Acababa de matar sin querer a un pajaro. Ya habia pasado antes. Pero no fue eso.

Algo no va bien.

Estoy matando algo más que a un pajaro torpón y breve. La tele, esta ciudad, mi forma de hablar, de pensar. Esos viajes y esas personas que se añaden a la historia del camino. Algo no va bien. No.

Esta mañana estuve dos horas observando un hormiguero. Era algo que no hacia desde niña. Simplemente salí al jardín y me senté en la pequeña ladera de la pineda que hace las veces de seto. Solo estaba perdiéndo un poco el tiempo mientras se me secaba el pelo al sol y, aun húmedo, descubrí hojas que se movían. Aquellas hormigas buscaban el primer bocado de esta primavera. Y me descubrí a mi misma, dos horas después, agarrándome las rodillas frente al hormiguero.

Sol, hormigas, pajaros. Mi gata esta a punto de dar a luz. ¿Cómo entran todas estas palabras en este lugar? No sé nada de metalenguaje, de reinstalaciones, de sistemas. Tampoco se gran cosa de eso que llaman vida. ¿Qué se? A medio camino de ninguna parte lo unico que hago es perder el tiempo intentando agrupar un dinero que no sé para qué me va a servir, ganar un nombre que de poco me ha de valer. Nada de hormigas y linuxs.

Conozco a alguien recien nacido en mi historia que una vez me dijo "Tenme en cuenta". ¿Porqué habría de hacerlo? ¿Debo pensar que ese alguien a quien apenas conozco puede prometerme lo que jamás nadie ha conseguido que no es otra cosa que permanencia perpetua? Ni siquiera yo permanezco.

Solo soy alguien que apenas sabe nada de demasiadas cosas. Conversaciones insulsas y tonterias varias. Nada más complejo que juegos de palabras que enmascaran mi verdad: nunca sabré sobre hormigas y nunca sabré sobre linuxs. Algo, definitivamente, no va bien.